La Policía Local de San Bartolomé de Tirajana / Maspalomas (Gran Canaria) detuvo el pasado fin de semana al dueño de una discoteca ubicada en una conocida zona turística. Los agentes arrestaron al empresario delante de los clientes, ya que el local se encontraba en pleno funcionamiento. Según fuentes policiales, en el establecimiento se estaban incumpliendo las medidas sanitarias contra el Covid, por lo que el hostelero ha sido sancionado con 960 euros de multa.

 

Momento de la detención del propietario de la discoteca Aqua, en Maspalomas (Gran Canaria).

Tal y como ha indicado la policía, los agentes se presenciaron en el local alrededor de las 21:30 del pasado sábado. Anteriormente, habían sido alertados de que en el establecimiento se estaba superando el aforo permitido, no se estaba respetando la distancia de seguridad y había personas bailando sin mascarilla.

Asimismo, la discoteca (Aqua) estaba compartiendo la música con dos locales colindantes —del mismo grupo empresarial—, cuando estos últimos (Zanzíbar Terraza y Zanzíbar Restaurante) no disponían del permiso necesario para poner música.

Finalmente, ante la falta de colaboración del empresario —que no quiso apagar la música ni aportar la documentación a los agentes—, el dueño de la discoteca fue detenido por desobediencia a la autoridad y pasó la noche en el calabozo.


 

Según apunta Europa Press, citando fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), tras la celebración de un juicio rápido, el empresario ha sido sancionado. El hostelero deberá abonar una multa de 8 euros diarios durante 4 meses por un delito de desobediencia a la autoridad.