Ya son al menos diez los muertos por el derrumbe de un acantilado de un cañón sobre el lago Furnas, cerca del municipio Capitólio, en el estado de Minas Gerais (Brasil). Un gran bloque de roca impactó directamente sobre dos embarcaciones y afectó a otras dos que allí se encontraban realizando excursiones para turistas. Los expertos apuntan a que el desprendimiento pudo producirse debido a las fuertes lluvias de los últimos días.

 

Vídeo del momento del derrumbe difundido en redes sociales.

Tras el accidente, un equipo del Cuerpo de Bomberos de Minas Gerais —en el que se incluyen 40 buceadores— acudió inmediatamente al cañón en búsqueda de posibles muertos y heridos. Finalmente, el recuento se ha saldado con ocho fallecidos, dos cuerpos más que aún no han podido ser extraídos del lago y un total de 32 heridos. Algunos de ellos aún se encuentran hospitalizados.

Según ha asegurado al diario Folha de S. Paulo Marcos de Souza Pimenta, delegado regional de Passos —municipio cercano al lago Furnas—, ahora lo importante es la identificación de las víctimas, "cuyos cuerpos han quedado muy dañados por el accidente". La mayor parte de los afectados por el derrumbe eran turistas brasileños, muchos de ellos procedentes de São Paulo.



 

El lago Furnas en uno de los principales destinos turísticos del estado de Minas Gerais, cuyo principal atractivo es precisamente el paseo en barco para poder apreciar sus cascadas de cerca. Durante las últimas semanas ha sido muy frecuentado debido a las vacaciones navideñas.