Barcelona ya suma más de 80 salas para practicar juegos de escape, y a pesar de la aparente inestabilidad del modelo de negocio (sólo se puede jugar una vez), sus creadores aseguran que sus empresas continuarán creciendo.

Entre los nuevos proyectos que están surgiendo destaca uno: el ‘scape room’ erótico que ha abierto sus puertas en el municipio de Sant Cugat del Vallès y que próximamente estrenará local en Madrid.

Esta nueva actividad está destinada al público adulto y se llama ‘Los siete pecados del placer’. El argumento de la historia se centra en “un grupo de agentes del departamento de la Moral, Sinceridad, Ética y Tolerancia, en una ciudad corrupta y perversa que ha cedido por completo a la inmoralidad”, según explica Faustino, el propietario de la sala.                  

Los participantes tienen 60 minutos para superar la prueba y, según cuenta el empresario, ya han intervenido más de 50 grupos. Los resultados siempre son óptimos y “está gustando mucho”.

Después del éxito que han tenido este tipo de locales en toda España, la temática acerca de la corrupción, más allá de la erótica, es el gancho que convenció a Faustino para llevar adelante la iniciativa.