Barcelona se enfrenta a la temporada alta de baño, la cual comenzó el pasado lunes y se mantendrá hasta el 17 de septiembre, es por ello que el Ajuntament ha estado considerando una serie de medidas para hacer una mejor gestión de sus costas, según ha corroborado Frederic Ximeno, comisionado de Ecología.

Las cifras apuntan que el año pasado 4,7 millones de personas disfrutaron de las playas barcelonesas, 900.000 más que en el verano de 2014. Cifra que se espera superar este año y que, según el consistorio, es excesiva para los 4,5 kilómetros de litoral marítimo de los que dispone la ciudad.

El Ajuntament, para ganar espacio, ha decidido finalizar cuatro licencias de hamacas y no prorrogar dos de sombrillas entre las playas de Sant Miquel y Sant Sebastià. Además, este año concluyen la cesión de los chiringuitos en las playas urbanas, los cuales cuentan con servicio de hamacas. De esta manera, se han ganado un total de 1.800 metros cuadrados de arena.

Otras medidas que se han programado para el comienzo de la temporada son la recolocación de arena que se había perdido en invierno, reparaciones de muros y pilares, y renovación del adoquinado de los paseos.

Además, con intención de mejorar los servicios y previniendo la gran afluencia que se espera esta temporada, se distribuirán un total de 224 papeleras por todas las playas.

Por otro lado, mañana abrirá la playa para perros en Llevant hasta el 25 de septiembre. La playa cuenta con una extensión de 1.200 metros cuadrados y aforo máximo de 100 perros, que deben estar identificados para mayor seguridad.