Durante los meses de verano son muchas las asociaciones ecológicas y vecinales que denuncian que la isla de Ibiza se colapsa. Lo que podría parecer una simple percepción ha sido refrendada por el diagnóstico encargado por el Consell sobre el Plan Territorial Insular (PTI), implantado en 2005.

Según informa Diario de Ibiza, el grupo de 15 arquitectos, geógrafos y licenciados en Derecho y Economía que han realizado dicho análisis inciden en que desde 2005 a 2017 el turismo ha crecido en la isla blanca “un 200%”, algo que consideran “insostenible a medio plazo”.

De hecho, el documento plasma que teniendo en cuenta este crecimiento, las estimaciones de evolución del Índice de Presión Humana (IPH) apuntan a “escenarios inasumibles completamente, ya que sobrepasarían considerablemente la capacidad de la isla en todas sus vertientes”. En concreto, prevé que en el verano de 2037 se podría llegar a máximos de 600.000 personas simultáneamente en Ibiza.

“Son unas magnitudes para las cuales la isla no tiene capacidad: ni en la oferta de alojamientos y camas, ni en el suministro de agua, ni unas infraestructuras de transporte suficientes, ni de seguridad y sanidad eficientes”, concluyen. Instan, por tanto, a tomar medidas para “poner un techo al número de turistas máximo” con el fin de que “sea sostenible y permita la convivencia” con los residentes.