Todas las miradas están puestas en Baleares y en cómo se va a gestionar la prueba piloto de reactivación turística que se desarrollará durante el mes de junio y que empezó este mismo lunes 15 con la llegada de los dos primeros vuelos operados por TUI fly con 350 personas entre los que había turistas autorizados, periodistas, ejecutivos de los touroperadores y profesionales del sector turístico.

Una vez que ha llegado a la prensa internacional, este experimento de apertura turística ha provocado un efecto llamada y esto ha llevado a algunos turistas a intentar “colarse” en Baleares sin contar con los permisos de los que sí disponían los viajeros llegados con TUI. Así, tal y como informa El Mundo, el mismo lunes un total de 25 personas fueron interceptadas en el control de Policía del Aeropuerto de Palma y fueron obligadas a volver a su país de origen.

En concreto, 10 llegaron desde Múnich en un vuelo operado por Lufthansa y otros 15 llegaron desde Zúrich (Suiza) con SWISS. Entre ellos había parejas y alguna familia. Estos no han sido los únicos casos, ya que el domingo anterior también ocurrió lo mismo con otros dos viajeros alemanes y un británico.

Estos pasajeros confundieron los mensajes lanzados en los últimos días y pensaron que cumplían las condiciones para poder visitar Baleares, sin embargo, más allá de los participantes en la prueba piloto, sólo se puede viajar por cuestiones laborales, sanitarias, de residencia o causas de fuerza mayor. Además, estos viajeros están obligados a guardar los 14 días de cuarentena, que serán obligatorios hasta el próximo 21 de junio.