El pasado lunes, el Parlamento de Reino Unido ha dado el visto bueno a la ampliación del aeropuerto Londres-Heathrow, después de que el Gobierno británico hubiera aprobado las obras, que se centran en la construcción de una tercera pista.

Según ha informado Capital Radio, la aprobación de la ampliación, que lleva cinco décadas debatiéndose y requiere de un presupuesto de 15.900 millones de euros, ha obtenido 415 votos a favor frente a 119 en contra. Sin embargo, la iniciativa aún debe superar diferentes pasos y se prevé que se inicien las obras en 2021.

Al respecto, la primera ministra, Theresa May, manifestó previamente a la sesión parlamentaria que las obras suponen “mandar un importante mensaje sobre la visión global de Gran Bretaña y sus oportunidades a futuro”. De hecho, es el aeropuerto europeo con mayor tráfico donde operan cerca de 80 aerolíneas que conectan unos 200 destinos internacionales y trasladan a 78 millones de pasajeros al año.

El Ministerio de Transportes británico, por su parte, estima que las obras doblarán la capacidad actual del aeródromo y facilitará 16 millones de plazas en vuelos internacionales desde Reino Unido en 2040.

Por otro lado, la noticia no ha debido sentar demasiado bien a las aerolíneas que operan en sus instalaciones, ya que temen que la ampliación del aeropuerto encarezca los billetes de vuelo al menos hasta 2026. Por el contrario, el grupo que puede beneficiarse de la ampliación es el español Ferrovial, máximo accionista del aeropuerto británico con un 25% del capital.