DriiveMe, servicio de alquiler de vehículos a un euro, ha llegado a España, que se convierte en el primer mercado en su estrategia de internacionalización. Ya se había lanzado en Francia donde cuenta con más de 500.000 usuarios. 

La iniciativa surgió hace cinco años y sus fundadores, Alexandre y Geoffroy Lambert propusieron entonces a los rentacars que usaran el servicio. Estas empresas deben mover vehículos todos los días para equilibrar sus flotas, es decir, dejar los vehículos en sus oficinas de origen, y esto supone un alto coste. Para optimizar esos traslados, DriiveMe propuso que lo hicieran clientes particulares, con las garantías y seguros necesarios. En la actualidad Hertz, Avis, Europcar y otras 500 firmas del sector utilizan los servicios. 

El director de la empresa en España, Constantin Lambert, ha señalado que las características geográficas del país son muy similares a las de Francia por lo que se muestra convencido de que muchos viajeros se sentirá atraído por el servicio: "Mientras que los precios de los billetes de tren y avión no paran de subir, DriiveMe ofrece la posibilidad de alquilar un coche por el precio de una lata de refresco".