Los hoteleros y las principales consignatarias de cruceros de la ciudad de A Coruña han decidido rebelarse contra la tasa turística que ha entrado este mismo lunes y que gravará a los viajeros con un coste que oscila entre uno y 2,5 euros por noche y huésped (limitado a un máximo de cinco días).
Según informa La Voz de Galicia, las empresas han unido fuerzas a través de la asociación hotelera Hospeco para presentar un recurso contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento, solicitando incluso la suspensión cautelar de la medida.
El presidente de la patronal, Agustín Collazos, asevera que se trata de una tasa inoportuna y argumenta que la ocupación media de la ciudad —en torno al 60%— no justifica la “tensión” turística requerida por la normativa autonómica para su aplicación.
A la batalla legal de los hoteleros se han sumado los hosteleros y la consignataria Rubine e Hijos. El director de esta última, Luis del Moral, advierte de que la medida pone en riesgo la competitividad de A Coruña como puerto de tránsito, sugiriendo que las compañías navieras podrían optar por otros destinos cercanos y más económicos como Ferrol a partir de 2026, fecha a partir de la cual las navieras asumirían el coste de la tasa.