Tapas, tortilla de patatas, paella, pintxos... si por algo se caracteriza España es por la variedad y riqueza de su gastronomía. Precisamente, chefs españoles de renombre, como Ferrán Adriá, Martín Berasategui, Ángel León, Susi Díaz, Joan Roca o Andoni Luis Aduriz, han hecho piña para defender el turismo gastronómico, reivindicando su papel tanto en España como en el resto del mundo. 

Al mismo tiempo, han solicitado más voz ante las administraciones públicas para incidir en la importancia de la formación y promoción del sector hostelero, duramente golpeado por el COVID-19. La pandemia obligó a cerrar los establecimientos hosteleros del país y no ha sido hasta ahora, con la llegada de la desescalada, que han podido reabrir pero con limitaciones de aforo. 

Los chefs se manifestaron en estos términos el pasado miércoles, 27 de mayo, en una rueda de prensa virtual organizada por HOSTELERÍA DE ESPAÑA, entidad que representa al sector y que agrupa a 50 asociaciones provinciales. El encuentro también contó con la presencia del presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi.

A este respecto, Berasategui manifestó: "Nos hemos dejado la piel en este sector y las instituciones han de situar la gastronomía en el mapa internacional. Quienes trabajamos en hostelería continuamos teniendo la ilusión del principiante y seguimos siendo conscientes de la importancia del esfuerzo diario para llevarnos a estar entre los líderes mundiales del turismo gastronómico”.
 

Por su parte, Susi Díaz, señaló: "Me siento muy orgullosa de la gastronomía española y me preocupa mucho cómo vamos a volver y en qué condiciones. Ahora mismo está en juego la vida de muchas personas". Por ello, pidió más claridad y transparencia al gobierno central, en lo que a la reapertura de los establecimientos se refiere. 

Formación

Por otro lado, estos genios de la cocina hicieron hincapié en la necesidad de invertir en formación. Por ejemplo, Joan Roca señaló: "Tenemos la necesidad de buscar la colaboración del Gobierno en varios frentes, uno de ellos, fundamental, en educación. Existen varias universidades españolas que han apostado por la inclusión de las ciencias culinarias en su oferta formativa, lo que demuestra que hemos logrado avances, pero aún falta mucho por recorrer. Por ello, es necesario definir un plan de formación que incluya la formación profesional dual, entre otros aspectos". 

Turismo gastronómico

Ángel León, a su vez, reparó en la "necesidad de un turismo que alimenta nuestros pueblos y nuestra gente, gracias al cual los turistas vienen a pasar un rato con nosotros y eso tiene una repercusión enorme"

En este sentido, Andoni Luis Aduriz reflexionó sobre el estilo de vida español, intrínseco al turismo gastronómico: "Hay dos aspectos que constituyen la esencia de la cultura española: la gastronomía y las relaciones sociales, algo característico y único de nuestro país". Así, destacó el informe ‘La gastronomía en la economía española. Impacto económico de los sectores asociados’, elaborado por KPMG, del que se desprende que el 15% de los turistas que visitan España, alrededor de 12 millones, lo hacen por su gastronomía, gastando un 20% más que el turista medio.
 

A este respecto, los chefs coincidieron en la importancia de potenciar el producto español en el extranjero. "Sin duda alguna, uno de los elementos más importantes en la recuperación del turismo de calidad será hacer una estrategia donde todos los actores –hostelería, restauración, hotelería, distribuidores, productores, industria alimentaria, etc.- estén unidos para mantener el estatus que la gastronomía española tenía antes del Covid-19. Esto es lo que permitirá atraer gran parte del turismo gastronómico del país", enfatizó Ferrán Adriá

La hostelería en datos

La hostelería emplea a 1,7 millones de personas en España, así como tiene un volumen de ventas de 123.612 millones de euros, con una aportación al PIB del 6,2%. Debido a la crisis sanitaria, el sector estima pérdidas de 67.000 millones de euros. También, la destrucción de entre 900.000 y 1,1 millones de puestos de trabajo directos e indirectos.