El Louvre de París es año tras año el museo más visitado del mundo. No obstante, el año pasado fue especialmente importante para el centro galo ya que registró un récord histórico a nivel mundial, en lo que al número de visitas se refiere: 10,2 millones. Esto supone un aumento del 25% con respecto a 2017, cuando recibió a 8,1 millones de personas.

De hecho, tal y como ha informado El País, la pinacoteca francesa fue alcanzada, en 2017, por el Museo Nacional de China (Pekín), que recibió a 8 millones de personas. Sin embargo, ningún museo del mundo había superado los 10 millones de visitas. El Louvre se quedó cerca de esta cifra en 2012, cuando albergó a 9,7 millones de curiosos, pero a partir de 2015 las visitas se desplomaron por los atentados terroristas en París.

Los extranjeros representan las tres cuartas partes de los visitantes al Louvre en 2018. Por nacionalidad, los franceses fueron los más asiduos, con 2,5 millones de curiosos (25%). Le siguen los estadounidenses con 1,5 millones y los chinos con poco más de un millón. Por su parte, los responsables del museo consideran que la afluencia de turistas procedentes de España, Alemania, Italia, Reino Unido y Brasil también ha influido en el récord de visitas.

La exposición de Delacroix fue uno de los principales atractivos de la pinacoteca, que fue apreciada por cerca de 540.000 visitantes, entre el 29 de marzo y 23 de julio. Asimismo, 565.000 alumnos acudieron al museo en visitas escolares. De todos los curiosos que se introdujeron en el Louvre el año pasado, la mitad tenía menos de 30 años y alrededor de una quinta parte menos de 18.

Sin embargo, Jean-Luc Martínez, presidente del Louvre, enfatizó que “no se trata de acoger más, sino de acoger mejor”. En este sentido, destacó las mejoras que se han efectuado en la pinacoteca en los últimos años, como cambios en la señalización, la traducción de textos, la renovación de las infraestructuras o los billetes con horario, lo que ha reducido las colas en los accesos.