El pasado martes, la Oficina de Información del Consejo de los Asuntos del Estado de China publicó un Libro Blanco en el que se detallan los proyectos de desarrollo de la industria espacial en el país. Este documento pone de manifiesto las ambiciones de la nación en cuanto a su industria espacial, en plena expansión y expone su estrategia para los próximos cinco años.Entre sus objetivos a corto plazo, se encuentra el envío de una sonda al lado lejano de la Luna en 2018, así como el lanzamiento de su primera sonda a Marte en 2020. La industria espacial está considerada como un símbolo nacional de prestigio. La ‘conquista del espacio’ está siendo coordinada por el Estado Mayor y, aunque el Libro Blanco no lo menciona, el Viceministro de Administración Espacial, Wu Yanhua ha confirmado que el objetivo final es enviar un astronauta a la Luna. Además, desde Beijing se ha asegurado que quieren abrir el sector a los inversores extranjeros.