El consorcio empresarial turístico Palma Beach hace un llamamiento urgente al Govern de las Islas Baleares para que comience a trabajar en una norma oficial que garantice la seguridad sanitaria de las islas mediterráneas con el fin de obtener un 2021 seguro y productivo a nivel turístico.

Juan Miguel Ferrer, CEO de Palma Beach, explica su propuesta: se trataría de un documento, parecido a un pasaporte sanitario, que obligue a todos los visitantes, nacionales e internacionales, a realizarse una prueba homologada por las autoridades sanitarias (PCR, test de antígenos, etc.) antes de viajar por el medio de transporte que sea. Para Ferrer el uso de este documento debería ser obligatorio para cualquier tipo de viaje: nacional, internacional e, incluso, para los propios residentes en baleares que quieran viajar entre islas.

“La situación es dramática y por ello debemos ser valientes y poner en marcha medidas contundentes que salvaguarden nuestra salud por encima de todo y, solo así, podremos salvar nuestra economía”, ha añadido en declaraciones recogidas por Mallorcadiario.com.

Ferrer sostiene que este documento debe tener carácter oficial y entrar en vigor a partir del 1 de enero, con el fin de dejar un margen de dos meses “a administración, oposición, sector y touroperadores para que se pongan manos a la obra en la redacción de este nuevo protocolo”. El objetivo de este planteamiento es demostrar que en Baleares “hacemos las cosas bien” y que es un destino seguro.

“Es importante que no cometamos los mismos errores que otras comunidades”, añade Ferrer y pone de ejemplo a Canarias donde el touroperador TUI Nederland ha tenido que adelantarse a que haya una regulación oficial y obligará a los turistas a someterse a un test Covid para poder embarcar en el avión a partir del 31 de octubre. Un hecho que, según Ferrer, “no sería necesario si existiera una normativa del Gobierno regional que garantice un destino seguro”.