El Consell de Ibiza no quiere invertir los 2,2 millones de euros, recaudado a través del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS), para la demolición de los apartamentos Don Pepe, ubicados en Es Codolar. Se trata de una iniciativa aprobada en octubre de 2022 y que contemplaba el derrumbe de varios edificios para devolver la zona, enmarcada en el Parque Natural de ses Salines, a su estado original.
Desde la administración insular aseguran que la demolición de los apartamentos “no saldrá adelante”, ya que “ni se va a cambiar, ni se va a tocar absolutamente nada”, según ha indicado un portavoz del Consell al Diario de Ibiza.
Desde el Consell han insistido en que “ni el Govern balear, ni el Consell, ni el Ayuntamiento [de Sant Josep], harán ninguna actuación que no esté pactada en la Comisión de Seguimiento” de los edificios Don Pepe, en la que se encuentran representados los vecinos afectados.
Cabe destacar que este es uno de los casos por los que el Impuesto de Turismo Sostenible ha sido duramente criticado, ya que, a pesar de ser recaudado a partir de la actividad turística, no se está implementando para mejoras en el sector. Los apartamentos Don Pepe son unos edificios —concretamente dos, el Bloque A y el Bloque B— que no están destinados al alojamiento turístico, sino en los cuales residen unas 100 familias. Los inmuebles se encuentran en un claro estado de deterioro e incluso uno de ellos no tiene licencia. Pese a ello, se quiere utilizar un impuesto turístico para derrumbarlos.
