El nuevo alcalde de Pollença (Mallorca), Martí March, quiere terminar con la polémica que rodea a los trabajos de remodelación del emblemático Hotel Formentor. Por el momento, el Ayuntamiento que dirige ya ha abierto el primer expediente sancionador contra la empresa responsable de las obras, Inmobiliaria Formentor S.A. por demoler el establecimiento de forma ilegal.

La propuesta de sanción —que aún no es definitiva— asciende a 293.919 euros y los afectados cuentan con un plazo de 15 días para presentar alegaciones. Desde el Ayuntamiento sostienen que, entre las diferentes licencias otorgadas para la reforma y ampliación del hotel, ninguna daba autorización para demoler el establecimiento, lo que se produjo durante el 2022.

Según el diario Última Hora, el Consistorio considera que la constructora incumplió la normativa urbanística vigente, concretamente, la Ley de Urbanismo de Islas Baleares. Dicha norma establecía que “la realización de obras de construcción, edificación, instalación o movimiento de tierras y suelo urbano o urbanizable sin el título urbanístico habilitante preceptivo se sancionará con una multa del 50 al 100% del valor de las obras”.