La Unión Europea ha decidido crear una lista negra de paraísos fiscales entre los que ha incluido a Túnez.

La lista en la que el organismo comunitario incluye a los países que no cooperan en la detección del fraude fiscal y la evasión de impuestos se encuentran Samoa Americana, Bahréin, Barbados, Granada, Guam, Corea del Sur, Macao, Islas Marshall, Mongolia, Namibia, Palau, Panamá, Samoa, Santa Lucía, Trinidad y Tobago, Túnez y Emiratos Árabes Unidos; no así territorios o estados miembros.

Destaca la presencia de uno de los principales destinos vacacionales de los europeos: Túnez. Una incorporación que no ha sido bien recibida por el ministro de Finanzas, Ridha Chalghoum, que considera “incorrecta e inapropiada” la decisión de Bruselas.

Según destaca ‘El Economista’, el responsable tunecino sostiene que la calificación "no se corresponde con el nivel de cooperación entre la UE y Túnez", aunque cree que la decisión europea puede deberse a las ventajas fiscales que se ofrece a las empresas de exportación y a los servicios financieros para los no residentes en el país.