El presidente ruso, Vladímir Putin, ha decidido disolver la agencia estatal de Turismo, Rosturizm. Las competencias serán asumidas directamente por el Ministerio de Economía. El objetivo, según se explicaba en el decreto mediante el que se anunciaba esta medida, es promover el desarrollo de la industria turística y optimizar las estructuras de los organismos federales.

Esta decisión llega en un momento delicado para la industria turística rusa, fuertemente impactada por las sanciones internacionales impuestas tras la invasión de Ucrania, señala The Moscow Times.

Cabe recordar que siguen vigentes la prohibición de arrendar aviones o de vender aeronaves, motores y repuestos a Rusia o el cierre del espacio aéreo a los aviones de propiedad rusa o pilotados por rusos. Además, muchas empresas turísticas occidentales dejaron de operar en el país y es imposible realizar pagos con tarjetas bancarias extranjeras. Esto se ha traducido en una caída del turismo internacional entre el 95 y el 97%.

Rosturizm fue fundada en 2004 y tenía como fin impulsar el desarrollo del turismo en Rusia y la llegada de visitantes internacionales. También se encargaba de ejercer el control estatal sobre los operadores turísticos y las organizaciones encargadas de la homologación de hoteles, pistas de esquí y playas. Desde 2019, estaba dirigida por Zarina Doguzova.