La polémica reforma del Palmeral del Oasis de Maspalomas (Gran Canaria) alcanza su ecuador, entre acuerdos con los hoteles circundantes para suspender las obras en los momentos de mayor afluencia turística, y críticas que lamentan que el proyecto abuse del asfalto. Dicho enclave es un espacio natural protegido de 90.000 metros cuadrados, ubicado en esta emblemática zona turística del sur de Gran Canaria.

Según informa Canarias7, el proyecto ‘Acondicionamiento Paisajístico del Palmeral Oasis de Maspalomas’ se ha presupuestado en 6,8 millones de euros (2,2 aportados por el Cabildo y 4,6 por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana). Hace un año dio comienzo su ejecución por la empresa Tragsa, con una finalización prevista para julio del 2026, aunque los trabajos pudieran retrasarse algunos meses más.

La actuación pretende devolver a esta degradada zona su esplendor natural, aun estando inserta en un área de importante explotación turística. Pero la omnipresencia del cemento en el proyecto levantó ampollas entre colectivos y parte de la ciudadanía, que teme que en realidad se esté reconvirtiendo un paraje natural de extraordinaria belleza en un domesticado parque para la visita de los turistas

En todo caso, el desarrollo de las obras está teniendo un carácter intermitente, pues la ejecución tiene en cuenta los requerimientos de alojamientos cercanos, como el Seaside Gran Hotel Residencia, que solicitó la suspensión de los trabajos durante la temporada alta veraniega, para no molestar el descanso de los clientes.