El domingo, durante un paseo por el sur de Gran Canaria, algo me llamó la atención. No era un gran proyecto ni una campaña publicitaria, era un detalle. Uno de esos que suelen pasar desapercibidos, pero que dicen mucho de una marca.

Un hotel de la cadena Meliá Hotels International ha integrado un elemento de la naturaleza en su entorno de forma cuidadosa y respetuosa, mostrando sensibilidad hacia el paisaje local y coherencia con el espacio que lo rodea.

Un gesto sencillo, pero significativo. Porque cuando el turismo se alinea con el entorno, aunque sea en cosas pequeñas, se nota… y se agradece.

Desde The Preusser Company valoramos y compartimos este tipo de prácticas. Son señales de un turismo consciente, comprometido y atento a los detalles —esos que generan una experiencia genuina.

Felicidades al equipo detrás de esa decisión. Ojalá más alojamientos se inspiren en este tipo de ejemplos.

 

*Irene Preusser es consultora en turismo y especialista en contratación hotelera. Es la fundadora de The Preusser Company.