Uno de los colectivos más afectados por la crisis económica, el de las camareras de piso, va poco a poco viendo cómo sus reclamaciones y quejas van produciendo resultados. Recientemente conocíamos que los hoteles de la Comunidad Valenciana  acumulan ya más de 720.000 en sanciones por explotar a las camareras de piso, una información acogida con optimismo por parte de las organizaciones sindicales que han encabezado las acciones de protesta.


Miguel Santiago, secretario de organización de la Federación de Servicios de CCOO en la Comunidad Valenciana ha atendido a Tourinews y ha afirmado que estas multas ?no serán suficiente?, aunque al menos servirán para poner en alerta a los empresarios hoteleros para que cumplan las reglas del juego. Sin embargo, ha insistido en que ?hay que ir más allá?. ?La legislación y la normativa laboral debe clarificar estas situaciones para que no haya lagunas en las que las empresas se puedan escudar durante años sin que la Inspección de Trabajo pueda hacer nada?, señala.


A su juicio, las sanciones que ahora son públicas ponen de manifiesto las malas prácticas que se llevan a cabo y que llevan mucho tiempo siendo denunciadas. Comunidades  como Madrid, Andalucía o Canarias también han comenzado a actuar, pero el origen de las denuncias está en Valencia. Santiago reconoce y lamenta que en cualquier caso ?a la Inspección de Trabajo le faltan medios para acometer un tema de esta envergadura. Ellos mismos lo reconocer habitualmente?. Es una cuestión que ha creado mucha controversia social, dado que es difícil de entender que durante los últimos añosen los que se han superado todos los records turísticos de ocupación y gasto, no se hayan mejorado las cifras de empleo. Según denuncia este portavoz de CCOO, estos registros ?no se han traducido en contratación estable, mejora de los derechos laborales o aumentos de salario, sino en contratos precarios y temporales, salarios bajos y precariedad?.


Desde la Federación de Servicios de este sindicato alertan también de que cuando se recurre a la externalización, todos esos problemas se multiplican por dos. ?La externalización es el gran puntillazo de las camareras de piso. Estas sanciones deben encaminarse también a corregir estas actuaciones?, aunque admiten que en realidad son totalmente legales. ?La única vía es el consenso entre los empresarios y patronales para que entiendan que terminan provocando una competencia desleal entre ellos mismos?, apunta. Santiago ha denunciado también que ?las lagunas de la reforma laboral han propiciado  situaciones de abuso total e indefensión de los trabajadores. La externalización está provocando situaciones de precariedad, que cobren un 40% menos de sueldo de lo que marca su convenio, que coticen menos a la Seguridad Social…?. Su consuelo está en que las camareras de piso ?son ahora el colectivo más visible, porque dentro del sector hotelero ?dice- quizá sean las más perjudicadas. Estamos satisfechos de que las campañas estén teniendo eco en la sociedad y especialmente en los organismos oficiales?.