La madrugada del martes al miércoles ha sido muy activa en la ciudad de Toledo, declarada Patrimonio de la Humanidad desde 1986, debido a un desprendimiento en uno de los tramos más icónicos de su famosa muralla que rodea el barrio histórico de la ciudad de las tres culturas.

El derrumbe, en el que no se produjeron daños personales, tuvo lugar en torno a las 2:40 horas en la calle Real del Arrabal, a la altura de la Puerta de Alarcones, bajo la Puerta de Alarcones —una de las seis puertas de la muralla las de Alfonso VI, del Vado, del Sol y de Bisagra—. Los arqueólogos e ingenieros del Ayuntamiento estudian el desprendimiento para determinar si provenía de los restos de la antigua muralla árabe o si solo se ha visto afectado el muro de contención.

Fue un vecino quien alertó a las autoridades y al lugar se desplazaron Policía Local y Bomberos para evitar riesgos a viandantes o conductores. También intervinieron los servicios de limpieza, para retirar cascotes de la calzada. A las 7:00 se restableció la normalidad en el tráfico rodado.

El Ayuntamiento de Toledo ha anunciado que, a través del área de Urbanismo y Obras, intervendrá de forma urgente. Para ello, durante la mañana del miércoles, los técnicos municipales han evaluado el alcance de los daños y la estabilidad del pavimento en aras de ofrecer una solución.
 

Vista del derrumbe Foto Ayuntamiento de Toledo

Vista del derrumbe | Foto: Ayuntamiento de Toledo