En plena ola de descontento por el modelo turístico de Canarias se ha reavivado el debate sobre imponer una tasa turística similar a la de otras comunidades autónomas como Cataluña y las Islas Baleares; una opción con la que estaría de acuerdo Un 43% de los residentes en Canarias, según la Encuesta de Hábitos y Confianza Socioeconómica (ECOSOC) del Instituto Canario de Estadística del segundo trimestre de 2024.
En esta encuesta se estudia la actitud de los residentes hacia el turismo a través de una serie de afirmaciones para las que se pide el grado de acuerdo y desacuerdo de las personas encuestadas. En el caso de la tasa, el 43% se muestra a favor, mientras que un 24% se muestra totalmente contraria.
En el área metropolitana de Tenerife y en la isla de Lanzarote se supera el 50% en el porcentaje de personas a favor de la tasa. También se encuentran por encima de la media autonómica La Gomera, Fuerteventura y las zonas sur y norte de Tenerife. El lugar donde mayor es el porcentaje de personas que dieron una negativa a la tasa es el norte de Gran Canaria, con un 34,1%, seguido de El Hierro (30,7%), área metropolitana de Gran Canaria (29,8%) y zona sur de esta misma isla (29,3%).
Eso sí, un 83% se ha muestra en contra de que dicha tasa se aplique a los residentes en Canarias durante sus vacaciones en alojamientos de las islas. Solo un 14,5% se muestran a favor.
Beneficios económicos, sociales y culturales, pero también efectos negativos
Asimismo, casi un 70% de los canarios piensa que el turismo es beneficioso porque atrae inversiones necesarias para las islas, pero al mismo tiempo genera un encarecimiento del precio de la vivienda. Además, el 62% considera que la actividad turística genera empleo precario. Por otro lado, más de la mitad de la población valora que el turismo contribuye al consumo de productos locales.
Algo más de la mitad de la población residente considera que el desarrollo del turismo tiene beneficios sociales como crear una sociedad más tolerante (56%), la mejora del prestigio y la imagen del municipio de residencia (53,2%) o la ayuda a mejorar las infraestructuras (55,7%). En contraste, un 44,5% de personas está de acuerdo con que el turismo contribuye a colapsar los servicios sanitarios y un 44,6% considera que el turismo provoca tensiones entre residentes, frente al 35,9% que no cree que esta afirmación sea cierta.
8 de cada 10 canarios considera que el turismo permite relacionarse con personas de otros lugares. Para el 72,7% favorece el intercambio y la comprensión de culturas. En cuanto a la afirmación de que contribuye a mantener la cultura y las tradiciones, el 44,7% se muestra de acuerdo y el 36,8% está en contra. En cuanto a la oferta de eventos culturales, un 57% percibe que el turismo contribuye a aumentarla, frente a un 25% que no lo ve así. Poco más de la mitad de la población residente (51,7%) muestra su acuerdo con que ayuda a conservar y revalorizar los monumentos, mientras que un 30% está en desacuerdo.
Más de la mitad de los canarios considera que el turismo trae algunas consecuencias negativas para el medioambiente, como un mayor consumo de agua, energía o suelo (62,1%). El 60.9% asegura que el la actividad turística genera demasiados residuos y contaminación y que perjudica el tráfico y la movilidad (56,2%). Por otro lado, también se percibe que los ecosistemas se ven dañados de forma irreparable a causa del turismo (57,1%). La mayoría de las personas discrepa de la afirmación de que el turismo ayuda a conservar los espacios naturales. Tampoco está de acuerdo en que el turismo tenga prácticas sostenibles que protejan el medio ambiente.