El alquiler turístico triunfa en Benidorm. La ciudad ha registrado durante la primera mitad de agosto un 92,3% de ocupación hotelera, 1,9 puntos menos que el año pasado y la patronal Hosbec cree que los clientes nacionales se han pasado a los apartamentos ilegales por su bajo precio. 

El español es el principal mercado en importancia en periodo estival, la planta hotelera sigue sin alcanzar las cifras previas a la crisis. El turista nacional acumula una caída media del 9% este año, lo que implica unas 300.000 pernoctaciones menos que en 2016. 

Desde Hosbec apuntan que “a la vista de los datos del aeropuerto, tren, carreteras y accesos a Benidorm, se puede afirmar que esta fuga de turistas nacionales no se está desplazando a otros destinos, sino que está utilizando la cada vez más numerosa oferta de alojamientos en viviendas, muchos de ellos ilegales y que constituyen un propio sistema de economía sumergida”.

Su presidente, Antonio Mayor, ha explicado que: “Benidorm sigue la pauta de otros destinos turísticos de primer nivel en España como Mallorca, Ibiza o Costa del Sol, que están registrando también ligeros descensos en sus niveles de ocupación hotelera durante este verano, teniendo en todos los casos el mismo origen o causa, el alojamiento ilegal”.

La previsión de ocupación para la segunda quincena de este mes es del 87,4%.