El Gobierno chileno hizo ayer entrega del Plan de Gestión de Carga para Isla de Pascua, un programa compuesto de 155 medidas que tienen como objetivo salvar Rapa Nui de la presión demográfica.

Según recoge El Comercio ahora será el recientemente creado Consejo de Carga Demográfica quien se encargará de realizar las correcciones pertinentes en un plazo de 60 días. Con todo resuelto, este plan entraría en vigencia el 31 de enero y daría soluciones a los problemas más acuciantes de este territorio. Estos puntos críticos han sido determinados por estudios de la Universidad Católica.

El plan establece, por ejemplo, que el número máximo de habitantes que puede tener Rapa Nui en sus condiciones actuales es de 9.230. Actualmente están censadas 7.750 personas, pero su ritmo de crecimiento (su población se ha duplicado en la última década) hace temer que la isla colapsaría en 2030. De hecho, algunas de sus áreas como la salud, la ganadería, la pesca y la vivienda ya están saturadas.

Desde agosto del año pasado se están aplicando nuevas reglas de residencia y acceso a la isla. El Ejecutivo ha fijado en 30 días la permanencia máxima de toda persona, extranjera o no, que quiera estar en territorio insular. Además, los turistas que llegan, deben pasar por un control que verifica que abandonan la isla dentro del plazo fijado.

Según afirman los locales, estas nuevas restricciones no han afectado ni ha comercios, ni a servicios ni a turismo. Es más, aseguran que el número de camas actual es superior a la ocupación. En 2017 100.000 personas visitaron la Isla de Pascua.