La Oficina de Asuntos Exteriores de Reino Unido ha extendido sus avisos respecto a la actividad de despachos de abogados que animan a los turistas a denunciar a los hoteles por padecer enfermedades gastrointestinales durante sus vacaciones a un nuevo país: Portugal.

En una actualización han señalado que “Se ha informado de un aumento del número de turistas a los que se ha persuadido para presentar una reclamación por lesiones personales por enfermedades gástrica durante su estancia”. Desde la entidad recuerdan que solo se deben tomar estas medidas en caso de haberla padecido realmente, reseñando que “si se hace una reclamación fraudulenta pueden enfrentarse a procesos legales en Reino Unido o en Portugal”.

Se trata pues de una advertencia similar a la que se hizo para España, donde se calcula que estas prácticas fraudulentas están suponiendo un coste de 60 millones al año.