Este verano está siendo intenso. En España y especialmente en Canarias, hay bastante movimiento… pero también muchas señales de alerta.

  • Se han lanzado muchísimas ofertas de última hora.
  • La venta directa se ha enfriado bastante.
  • Y los precios de los vuelos siguen por las nubes.

Aunque las ocupaciones están saliendo adelante, cuesta mucho más generar reservas con antelación. El cliente lo piensa dos veces antes de cerrar, y en muchos casos, directamente descarta viajar por el coste del aéreo.

Esto me lleva a preguntarme:

  • ¿Estamos tocando techo con los precios?
  • ¿Hasta qué punto el mercado va a seguir aceptando esta escalada?

Creo que toca parar un momento y reflexionar. No todo vale. La presión por llenar plazas a última hora, sacrificando márgenes y planificación, no es una estrategia sostenible.

  • ¿Qué opináis desde vuestros puestos?
  • ¿El cliente está llegando a su límite?
  • ¿Es momento de replantear política de precios y ventas?
  • ¿Qué piensan hacer para invierno?

 

*Pierre-Philippe Fernández es Contracting Manager de Corendon para Canarias