La Comisión Europea aprobó el miércoles una nueva normativa en cuanto a los requisitos que deben cumplir los Estados para invertir fondos públicos en aeropuertos regionales sin que estas acciones sean notificadas a Bruselas, requisito que se debía cumplir hasta ahora. Margrethe Vestager, comisaria de Competencia, fue la encargada de presentar las novedades en una rueda de prensa. 

Se permitirá que los países destinen financiación pública a las instalaciones regionales que registren un tráfico anual de hasta 3 millones de personas. Esta decisión facilitará las inversiones públicas en unos 420 aeropuertos de toda la Unión Europea, que representan un 13% del tráfico aéreo.  En España, algunas de las instalaciones que se beneficiarán serán las de Santiago de Compostela, Girona, Asturias, La Palma, Murcia, A Coruña, Vigo, Almería o Jerez de la Frontera. 

Sin embargo, no se concederán a aquellas que se encuentren en zona de influencia de otro aeropuerto (100 km de distancia o 60 minutos de viaje).  La ayuda tampoco podrá superar la cantidad necesaria para la inversión y solo podrá estar destinada a cubrir parte de los gastos. Esto dependerá del tamaño del aeropuerto y su ubicación. .

Asimismo, las nuevas normas permitirán que cada nación cubra los costes operativos de aeropuertos con tráfico de hasta 200.000 viajeros al año, casi la mitad de todos los de la Unión Europea. También se permitirá destinar ayudas de hasta 150 millones a puertos marítimos y hasta 50 a puertos interiores, sin supervisión de Bruselas. 

Vestager puntualizó que "la cuestión de los aeropuertos fantasma creo que es muy importante y aquí no hay cambio político. Esto es para aeropuertos existentes, no es para abrir nuevas oportunidades para construir aeropuertos o construir nuevos. Ese es otro territorio".