Un cerrojazo masivo en toda regla. Y sin fecha de reapertura. Los peores pronósticos han empezado a cumplirse en la Costa del Sol. Las empresas hoteleras que dependen del turismo internacional tienen serios problemas de solvencia ante la escasa ocupación por la crisis sanitaria generada por el Covid-19. El impacto de las cuarentenas decretadas por emisores claves como Reino Unido ha hecho que los hoteles no aguanten más, a lo que se le suma la situación que atraviesa la economía española ante el paulatino cierre de empresas, y los 800.000 trabajadores que se encuentra dentro de la incertidumbre de un ERTE.

Se había conseguido alargar hasta final de octubre la temporada alta y acortar así el periodo de inactividad, señaló Luis Callejón Suñé, presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa, pero sigue decreciendo la demanda. Se espera que cierre de establecimientos sea del 80% de los hoteles de la Costa, cuando en las últimas temporadas dicha cifra se mantenía operativa, informa Diario Sur. El cerrojazo ha comenzado en hoteles emblemáticos que nunca han dejado de operar en temporada baja, como Pez Espada, el Alay, el Meliá Costa del Sol o el MS Amaragua, entre otros, cuya apertura estará a expensas de la evolución de la pandemia.