Los negocios inmobiliarios de Blackstone, uno de los principales propietarios hoteleros de Europa y el principal de España a través de Hotel Investment Partners (HIP), siguen sembrando dudas. Y es que la compañía no ha hecho frente al pago de la deuda sobre parte de la cartera de activos Sponda, empresa finlandesa de inversión inmobiliaria comprada por el fondo estadounidense en 2018.

Con la compra, Blackstone adquiría numerosas oficinas y locales comerciales en la periferia de Helsinki, pero también un préstamo de 297 millones de euros cuyo plazo vencía este febrero. Al no poder hacer frente a su pago —la rentabilidad ha sido baja debido a que la ocupación de las oficinas ha caído a causa del teletrabajo, con un 45% de desocupación— pidió un aplazamiento a los bonistas, pero estos se han negado, informa Reuters.

Ahora, se buscará rápidamente un comprador para los activos y así poder hacer frente a la deuda. Desde Blackstone explican a Tourinews que no hay ningún problema estructural con Sponda y que la deuda "se refiere a un pequeño número de activos no esenciales". Inciden en que "a nivel global, la cartera de Sponda continúa operando bien"Pero esta situación ha llevado a muchos a temer que el “constipado” del mercado inmobiliario se extienda y que, buscando seguridad, los inversores se enfoquen aún más en los hoteles, con buenas perspectivas de rentabilidad gracias a las altas perspectivas de crecimiento del sector.

El mayor propietario hotelero de España


A través de HIP, The Blackstone Group cuenta con un porfolio de 73 hoteles que suman 21.479 habitaciones distribuidas entre España, Grecia, Italia y Portugal. A nivel global, Blackstone fue propietaria de Hilton Hotels Corporation durante 11 años, durante los cuales ayudó a duplicar el tamaño de la empresa a más de 5.300 propiedades en todo el mundo. Entre sus inversiones recientes en el sector de la hotelería destacan la compra de la australiana Crown Resorts, ocho hoteles en Japón que pertenecían a Kintetsu Group, la compañía británica Bourne Leisure o la cadena estadounidense Extended Stay Hotels —esta última fue una adquisición conjunta con Starwood Capital Group.