Aprovechando el auge que está viviendo la inversión hotelera, una vez ya olvidado el varapalo mundial que supuso la pandemia del covid en el periodo 2020-2022, en España está empezando a despegar un nuevo segmento alojativo que se espera que coja velocidad de crucero en menos de un lustro: los serviced apartaments —apartamentos serviciados— y las branded residences —residencias patrocinadas—.
Tal y como informa la abogada especialista en derecho inmobiliario Lourdes Barriuso, en una publicación en el portal Idealista, se espera que este segmento turístico-residencial crezca “de forma exponencial” en España en los próximos años, superando en 2027 las 1.200 unidades en el caso de las branded residences. Los grandes polos de atracción turística como Madrid o Barcelona y los destinos vacacionales como la Costa del Sol o Canarias son las zonas en las que se espera que se incremente en mayor medida la inversión.
¿En qué consisten?
Los serviced apartments son apartamentos con servicios hoteleros y en el caso de las branded residences estos servicios son prestados bajo una cadena hotelera o marca de lujo. El inversor que decida comprar uno de estos activos inmobiliarios se reserva hasta un máximo de 60 días al año para su uso y disfrute. El resto del tiempo lo cede en explotación a una compañía hotelera y los usuarios de los apartamentos podrán disfrutar de amenidades y servicios que se prestan en el hotel.
“Intervienen, por tanto, tres partes en esta relación jurídica: el promotor, que desarrolla un suelo o reforma un edificio para uso hotelero; el inversor, que compra el activo; y el operador o gestor hotelero, que presta los servicios de hotel en los apartamentos, que pueden estar patrocinados bajo una cadena o marca de lujo, como es el caso de las branded residences”, detalla la abogada.
Razones de su crecimiento
Este segmento está demostrando en España su atractivo para inversores particulares —en su mayoría extranjeros—, que desean poseer una segunda residencia y a la vez participar del auge de la inversión hotelera en España.
“El promotor de un suelo de uso hotelero o rehabilitador de un activo apto para uso hotelero incluye en su mix [sic] de producto este tipo de apartamentos para reducir el riesgo y aumentar la rentabilidad de su proyecto —la marca hotelera le permitirá vender los apartamentos a mayor precio— y, a su vez, reducir la necesidad de financiación, pues la venta de los apartamentos reducirá la deuda financiera”, explica Barriuso.
Por su parte, el inversor que compra uno o varios apartamentos espera igualmente obtener mayor rentabilidad con la explotación por un hotelero experto bajo una marca reputada —branded residences—. Así, el operador hotelero obtiene un mix de producto más amplio y flexible, que contribuye a mejorar sus resultados.
