La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo permitió a la asociación Consumidores y Usuarios de Baleares (Consubal) defender la denuncia que interpuso por las “prácticas abusivas” de Ryanair, al “separar familias en los vuelos”, el jueves 5 de septiembre.  

Según informa Diario de Mallorca, Alfonso Rodríguez, portavoz de Consubal, reparó en que la 'low-cost' irlandesa "asigna sistemáticamente asientos separados a las familias que viajan con niños, con el fin de que los usuarios tengan que pagar para que se les asignen asientos continuos". 

La asociación comenzó a indagar en esta práctica, cuando una madre se vio obligada a pagar 4 euros por sentarse junto a su hija de tres años en un vuelo Palma (Mallorca)-Madrid, operado por Ryanair. Por ello, Consubal invitó al Parlamento Europeo a estudiar y a pronunciarse sobre si esta actividad "contravenía los derechos de los pasajeros de las empresas 'low-cost', en general, y de Ryanair, en particular".  

A este respecto, el Parlamento Europeo cree que "se podría estar contraviniendo" algunas recomendaciones de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (Aesa), especialmente la que "determina que los menores de 12 años acompañados de un adulto tendrán que viajar en asientos contiguos o, como caso extremo, separados por una fila o por un pasillo". 

En aquel entonces, Ryanair negó las acusaciones de "prácticas abusivas", a las que tildó de "falsas", realizadas por Consubal. Pese a ello, desde la compañía matizan que "cualquier adulto que viaje con un menor de 12 años debe adquirir un asiento (disponible desde 4€) para evitar que la asignación aleatoria separe a los menores de su familia".