Los legisladores griegos han decidido transformar su tasa turística, que gravaba las estancias hoteleras desde 2018, en un 'impuesto por crisis climática'.

Según recoge Greek Travel Pages, los hoteleros, los propietarios de villas o propiedades turísticas publicitadas en Airbnb deberán cobrar una tarifa diaria, cuyos ingresos se destinarán a un fondo de emergencia especialmente creado para hacer frente a desastres naturales.

Las tarifas que se aplicarán varían según temporada y tipo y categoría de establecimiento. De marzo a octubre los precios oscilarán entre los 1,5 y los 10 euros por noche/persona. De noviembre a febrero, será entre 0,5 y 4 euros.

Actualmente, la tasa grava a los establecimientos hoteleros según su categoría: 0,5 euros por noche para los hoteles de una y dos estrellas; 1,50 euros para los de tres estrellas; y 3 euros para los de cuatro y cinco estrellas.