El Gobierno de la India ha tenido que elevar el límite de retirada de efectivo de los bancos hasta 10.000 rupias (137,10 euros) por día, 24.000 (329,04) semanales y el intercambio en los mostradores de los bancos hasta 4.500 (61,70) después de las protestas de miles de personas que esperaban para cambiar los billetes de 500 (6,86 euros) y 1.000 rupias (13,71 euros) que el ejecutivo sacó de la circulación el martes anterior con el fin de acabar con la corrupción y frenar los extremistas islámicos, a los que se acusa de financiar sus actividades con billetes falsos de 500. En los últimos días, los bancos indios han recibido lo equivalente a 41,21 millones de euros de estos billetes, que suponen más del 80% del dinero en circulación. Esta restricción ha dejado a millones de personas sin efectivo, entre ellos, los turistas que están visitando el país y amenaza con paralizar la economía. El Banco Central del país ha declarado en un comunicado que “la gente no tiene por qué ponerse ansiosa” y no debe acumular efectivo porque “hay dinero disponible para cuando se necesite”. La economía sumergida representa hasta el 20% del Producto Interno Bruto (PIB), según la firma de inversión Ambit