Los autocines, que se popularizaron en los años 60 y 70, podrían volver a ponerse de moda como alternativa a las salas de cine tradicionales, debido a la crisis del coronavirus.
Tal y como reseña World Curioso, la situación sanitaria ha obligado a las salas de cine de muchos países a cerrar sus puertas. Entre los motivos por los que se tomó esta decisión, figura la importancia de respetar el distanciamiento social y evitar las aglomeraciones para frenar la cadena de contagios.
Precisamente por ello, los autocines se han vuelto a convertir en una opción interesante para proyectar películas, ya que se trata de lugares abiertos (al aire libre), en los que cada usuario ve el filme desde su coche, pudiendo estos estacionar de tal manera que respeten la distancia de seguridad.
De acuerdo con el diario citado, a principios de marzo, se aprobaron en Alemania 43 licencias para abrir autocines. En Estados Unidos se estaría produciendo un fenómeno similar ya que muchos usuarios, ante la situación sanitaria, habrían optado por este tipo de cine, una tendencia que podría devolverle el éxito a estos viejos retiros para disfrutar del séptimo arte.
