Dada la importancia que tiene la conservación de esta especie, la Policía Federal de México custodia las playas de este país para evitar el robo de huevos de tortugas marinas.

A principios del mes de octubre, el gobierno mexicano anunció que la reserva de Revillagigedo, un archipiélago en el océano Pacífico, a unos 400 kilómetros del balneario de Cabo San Lucas (costa oeste de México) se convertirá en el área natural protegida, sin actividad pequera, más grande de Norteamérica.

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En Revillagigedo habitan diversas especies de peces, crustáceos y aves, muchas de ellas amenazadas. Su Parque Nacional alberga algunas de las mayores poblaciones de fauna marina del mundo como tiburones, mantarrayas, grandes peces pelágicos, mamíferos marinos y tortugas, la mayoría protegidas por la legislación mexicana. 

Cuatro de las seis especies de tortugas marinas que habitan las costas mexicanas están en este entorno natural único.

En julio de 2016, la UNESCO incluyó al Archipiélago de Revillagigedo en su Lista de Patrimonio Mundial por sus atributos biológicos y su excelente estado de conservación.