El grave fallo en el sistema de control del tráfico aéreo en Reino Unido que tuvo lugar el pasado lunes, 28 de agosto, no solo se saldó con un caos en los aeropuertos británicos y los europeos —como el de Mallorca—, sino que también ha generado problemas a los hoteles españoles que esperaban a unos huéspedes ingleses que no llegaron.

Habitualmente, hoteleros y touroperadores pactan una compensación ante los ‘no show’, la no comparecencia de los huéspedes que tenían reservada una plaza; sin embargo, esta vez los touroperadores se niegan a hacer ese pago alegando que se ha tratado de un caso de “fuerza mayor”.

Profesionales hoteleros consultados por Tourinews aseveran que “hay un resquemor en el sector porque los TT.OO. están usando el concepto de fuerza mayor muy a la ligera” y han decidido unilateralmente no abonar los gastos de cancelación.

¿Quién es el culpable?


Las fuentes consultadas por este diario admiten que cuando se trata de algo externo o imprevisto como un volcán, una huelga o un huracán no se puede culpar a nadie; pero, en este caso, apuntan a la responsabilidad Servicio Nacional de Tráfico Aéreo (NATS) de Gran Bretaña. “Si el sistema se ha caído es porque alguien ha hecho algo mal, porque no se ha protegido lo suficiente o porque no se han tomado las medidas oportunas. Ese debe ser el culpable al que podamos exigirle unas compensaciones”, recalcan.

Para los hoteleros es el responsable final, porque cobra por un servicio que ha fallado. “No puede ser que cada uno apechugue con lo que ha perdido y esta gente se vaya de rositas cuando cobraban por ello y ha fallado”, critican.

NATS es una empresa público-privada de la que un 49% pertenece al estado británico —que también tiene la acción de oro—; un 5% a sus empleados; un 4% a LHR Airports Limited; y un 42% a The Airline Group, entidad que tienen participaciones British Airways, easyJet, Virgin Atlantic Airways, Deutsche Lufthansa o TUI Group.

"En la parte privada de NATS hay empresas que son las que dicen que esto es fuerza mayor. ¿Una subsidiaria tuya es la responsable de mantener el control aéreo y falla y tú ahora me dices que las pérdidas las tengo que asumir yo?", se preguntan los hoteleros.

Llegar a un acuerdo común


Los profesionales españoles insisten en “la necesidad de encontrar un criterio común”, puesto que consideran que en la situación actual están “desprotegidos”. “La clave es llegar a un consenso de lo que es fuerza mayor y lo que no. La letra pequeña de los touroperadores es tan ambigua que todo es fuerza mayor si ellos quieren. Y nos vemos indefensos”, sentencian.

Debe existir una claridad de lo que es fuerza mayor. Hay que ser más preciso. Llevamos muchos años de turismo y muchas incidencias de toda índole —virus, volcanes, huelgas y hasta de guerras— como para que esté estipulado. Si hay una empresa que cobra dinero por el control, alguien tendrá que ser responsable.