Argentina investiga la inusual muerte de cetáceos que se ha dado en las últimas semanas en la turística provincia de Chubut, 1.400 kilómetros al sur de Buenos Aires. Desde el pasado 24 de septiembre, al menos 15 individuos de ballena franca austral han sido encontrados muertos. Se trata de una especie protegida en Argentina como Monumento Natural Nacional.

La primera fue vista en Punta Pardelas, en la entrada de la península Valdés, uno de los puntos más turísticos de la provincia. Se trata de una zona de avistamiento de estos animales, ya que allí la ballena franca austral se reproduce y da a luz durante la primavera austral, es decir, en estas fechas.

Ahora, el Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) se está encargando —además de realizar las necropsias de los individuos encontrados— de hacer una monitorización de la población de esta especie en la costa patagónica argentina.
 


“Ninguna de las ballenas evaluadas hasta el momento presentó evidencia de lesiones traumáticas ni enmallamientos, y todas se encontraron con muy buen estado nutricional, con evidencia de contenido intestinal en algunos ejemplares, indicando su alimentación reciente dentro del golfo”, ha detallado Agustina Donini, coordinadora de Campo del programa de investigación.

Dicha explicación, sumada al número inusualmente alto de ballenas adultas muertas en tan corto periodo de tiempo y en una misma área, lleva a los investigadores a pensar que el motivo de los fallecimientos “pueden ser indicadores de variables ambientales locales”, como la marea roja.