Gran cantidad de hoteles de Cataluña, sobre todo de zonas como la Costa Brava o la Costa Dorada, han comenzado a suspender sus contratos con touroperadores rusos como Tez Tour o agencias receptivas especialistas en mercados de Europa del este como iTravex. La batería de sanciones a nivel europeo y mundial sobre Rusia por su invasión a Ucrania ha detenido el flujo de turistas rusos, ya que sus aerolíneas tienen cerrado el espacio aéreo de la UE.
Localidades como Salou (Tarragona) o Lloret de Mar (Girona) son grandes núcleos turísticos para el mercado ruso, pero la situación actual está provocando que los establecimientos empiecen a buscar alternativas en diferentes mercados para evitar otra temporada con bajas cifras de ocupación, tras la crisis del covid-19.
“Teníamos contratos listos con turoperadores rusos, solo con una cláusula pendiente del reconocimiento de la vacuna Sputnik para que los clientes pudieran viajar a Europa”, ha afirmado a La Vanguardia Jordi Abellí, director de operaciones de la cadena hotelera Med Playa. Ante este giro de los acontecimientos, los 22 hoteles de esta cadena catalana podrían perder entre un 20 y un 30% de su clientela.
