La aerolínea estadounidense de bajo coste JetBlue ha anunciado la cancelación de entre el 8% y el 10% de su programación de verano (afectará a los vuelos a partir de mayo). Esta decisión se debe a los continuos problemas operativos que viene presentando desde finales del año pasado. Ejemplo de ello es que durante los 10 primeros días de abril la compañía canceló 1.400 vuelos y el 50% de los que operó llegaron con retraso.

“Dado que prevemos desafíos continuos en la industria y una gran demanda en verano, estamos planificando de manera más conservadora debido a los eventos que puedan producirse con respecto al control de tráfico aéreo o un clima disruptivo”, ha explicado Derek Dombrowski, portavoz de JetBlue.

El motivo de todas estas cancelaciones y retrasos, de acuerdo con Dombrowski, es la escasez de personal. A pesar de haber contratado a más de 3.000 tripulantes durante este año, la dotación de personal de JetBlue sigue siendo escasa.

“Desafortunadamente, durante los primeros meses de 2022, se acumuló un retraso en nuestro programa de capacitación, debido a la ola de ómicron, que afectó a profesores y alumnos”, ha añadido Dombrowski en declaraciones al diario Travel Weekly.