Peter Fankhauser, CEO de Thomas Cook, ha pedido al gobierno británico que tome medidas contra las compañías de abogados que instan a los turistas a que realicen reclamaciones fraudulentas alegando enfermedades inexistentes para conseguir indemnizaciones. 

Según el ejecutivo, este tipo de demandas está causando millones de euros de pérdidas a la industria turística.

La Asociación Británica de Agencias de Viajes (ABTA) ha declarado que las reclamaciones a algunos operadores turísticos han aumentado en un 434% en los últimos dos años, registrándose en los casos más extremos incrementod del 700%. Por ello, algunos resorts populares en destinos de Turquía, como Antalya o Marmaris, han cancelado sus contratos con los operadores turísticos británicos. 

Fankhauser alerta de que la industria ahora se enfrenta a que los hoteleros de sus establecimientos más populares en destinos como España puedan dejar de aceptar a británicos debido a estos incidentes recurrentes.