La Autoridad de la Aviación Civil británica quiere revisar las políticas de asientos asignados por las aerolíneas. El motivo, según afirman desde el medio turístico Travel Mole, son las diversas quejas de los consumidores denunciando que las actuales normas de asientos en las compañías son confusas.

La investigación pretende esclarecer si las aerolíneas dividen a los pasajeros que viajan en grupo o en parejas para conseguir más ingresos. Tal y como afirman, las compañías de vuelos británicas están ganando unos “390 millones de libras al año en asientos asignados”.

Según una encuesta elaborada por el propio organismo de aviación entre más de 4.000 personas, más de la mitad de los consumidores encuestados afirmaron que su compañía no les informó de que tendrían que pagar extra por poder sentarse junto a su a acompañante.

A ello se suma la confusión que supone que la aerolínea establezca sus propias políticas. De las conclusiones de la encuesta se desprende que el 35% de lo pasajeros que volaron con Ryanair se separaron de su grupo por no pagar asientos juntos, así como al 22% de los pasajeros que volaron con Emirates y el 18% de Virgin Atlantic.