Dentro de la disputa que mantienen Boeing y Airbus, la Organización Mundial de Comercio (OMC) ha sancionado a la empresa estadounidense con una multa de 5.700 millones de dólares por haber percibido más de 5.000 millones de euros por parte de Estado de Washington para la fabricación de su 777X. En contraprestación, la compañía garantizaba que dicha construcción se llevaba a cabo en el estado y que no contaría con piezas fabricadas en cualquier otra nación.Esta decisión ha sido bien recibida por la Comisión Europea que la ha calificado como “una importante victoria para la Unión Europea y su industria aeronáutica", según palabras de la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, que aseguró que esperan “que Estados Unidos respete las reglas y elimine esos subsidios sin ningún retraso".Se trata de un paso más en un contencioso que mantienen las compañías situadas en ambos lados del atlántico. Por un lado, Estados Unidos denuncio ante la OMC los subsidios que Airbus recibía por la fabricación del A380, mientras que también está activo otro caso relacionado con las ayudas por parte de la Nasa y el Departamento de Defensa estadounidense a la I+D de Boeing.