El Consell de Mallorca se prepara para cancelar el actual proceso de adjudicación de 654 plazas de alquiler vacacional tras los continuos fallos en el sistema informático en el que se deben registrar las solicitudes. La plataforma, que ya había mostrado limitaciones en convocatorias anteriores, colapsó desde el primer día, provocando múltiples reclamaciones y poniendo en entredicho la igualdad de condiciones entre los aspirantes.

El registro de peticiones comenzó el 1 de septiembre, pero el sistema se bloqueó de inmediato, obligando a reabrir el plazo al día siguiente. Pese a mantener el proceso activo durante 15 días, los problemas persistieron, con momentos en los que se recibieron más de 300 solicitudes en un solo minuto. Los técnicos confiaban en que la plataforma —la misma utilizada por la diputación de Albacete— soportaría el volumen de actividad, pero finalmente no fue así.

Este no es el primer incidente. En julio, una convocatoria para adjudicar 500 plazas en edificios catalogados como Bien de Interés Cultural ya tuvo que ser anulada por un colapso similar, lo que obligó a reabrirla el 9 de septiembre. 

Las quejas de los solicitantes, que alegan no haber podido acceder al sistema en igualdad de condiciones, han reforzado la necesidad de una revisión completa. El Consell defiende que la concurrencia equitativa es esencial para un procedimiento justo, por lo que la cancelación del proceso de alquiler vacacional parece inevitable. Y es que cabe recordar que en este proceso se conceden las licencias en el orden de llegada de la solicitud.

Según informa Última Hora, la institución mantiene conversaciones con la patronal Habtur para buscar soluciones, incluida la posibilidad de adoptar métodos de adjudicación que no dependan del orden de registro, con el objetivo de evitar nuevos colapsos y garantizar la transparencia en futuras convocatorias.

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