Un Boeing 737 abandonado en Bali (Indonesia) se ha convertido en una atracción turística. Cómo llegó hasta allí sigue siendo un misterio sin resolver. Lo cierto es que numerosos viajeros se acercan a la zona para inmortalizar tan inusual estampa.

El aparato se encuentra en el sur de Kuta, en un campo que ha sido cerrado y puesto bajo vigilancia.

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Según cuentan los lugareños, el avión debía haberse convertido en un restaurante, pero el propietario se quedó sin dinero y lo dejó abandonado allí a su suerte.

Otro Boeing 737 se encuentra en Kedonganan, justo al lado de un Dunkin Donuts. La aeronave está tan cerca de la calle que una de sus alas cuelga sobre la carretera.