La ordenanza con la que el Ayuntamiento de Toledo quiere poner límites al turismo está más cerca de entrar en vigor. Desde el consistorio quieren ponerla en marcha en enero de 2026, una vez se valoren todas las propuestas presentadas durante la fase de alegaciones, que se cerró el pasado 19 de septiembre.
El concejal de Turismo, Vivienda y Relaciones con la UCLM, José Manuel Velasco, ha informado que se está realizando un examen detallado de las mismas, “para nosotros era fundamental que este proceso fuese participativo, basado en el consenso y en la escucha a todos los colectivos y ciudadanos”. En este sentido, ha adelantado que se tendrán en consideración algunas de las propuestas presentadas por asociaciones y particulares, al entender que enriquecen el texto normativo.
Entre las aportaciones más relevantes, Velasco ha subrayado las relacionadas con la limitación de grupos turísticos en determinados puntos del Casco Histórico, más allá de los inicialmente propuestos. “No descartamos ampliar la regulación a nuevas zonas, pero siempre con datos objetivos y el aval de la Policía Local”, ha indicado.
El concejal también se ha referido a alegaciones que no podrán ser aceptadas por falta de competencia municipal, como la petición de limitar grupos turísticos en toda la ciudad o la propuesta de ayudas directas para la adquisición de dispositivos de audio. “Debemos ser muy cuidadosos para que la normativa se ajuste al marco legal y no genere desigualdades”, ha puntualizado.




