Las bicicletas eléctricas, también conocidas como ‘e-bikes’, constituyen un fenómeno que gana, cada vez, más adeptos en España y podría convertirse en una alternativa de movilidad urbana.

Esta modalidad de traslado por núcleos densamente poblados, es una realidad cotidiana en países como Alemania, donde se vendieron más de medio millón el año pasado, o en Holanda. En 2016, en España, se comercializaron unas 40.000 unidades, un 4% del total de bicicletas vendidas.

Aunque son pocas todavía las que circulan por las ciudades españolas, en un año las ventas casi se han duplicado y no han dejado de aumentar desde 2014. Según comenta Carlos Núñez secretario general de la Asociación de Marcas de Bicicletas de España (AMBE), "la e-bike se está convirtiendo en un vehículo sustitutivo del coche. A esto han ayudado servicios públicos como  BiciMAD, que han demostrado que puedes moverte por toda la ciudad, por muchas cuestas que haya y llegar al trabajo sin despeinarte”.

Actualmente, los límites al tráfico en las grandes ciudades, posibilitan el desarrollo de los transportes sostenibles. Según AMBE, metrópolis como Sevilla, Vitoria y Barcelona, acumularon un 7% de desplazamientos entre bicicletas eléctricas y normales.

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"El mercado en España está creciendo, incluso más rápido de lo esperado", asegura desde Canadá Ryan Citron, coautor del informe de 2016 ‘Electric Mobility in Smart Cities’ de 'Navigant Research', consultora especializada en tecnologías emergentes. Citron prevé que para 2025 el alza del sector pase del 9% al 21% en Europa Occidental, y sitúa la ‘e-bike’ como el vehículo eléctrico más vendido del planeta.

De todo lo anterior se traduce que el universo ‘e-bike’ se encuentra en expansión. Solo durante el año 2016 nacieron 56 nuevas compañías, en un sector que aumenta considerablemente su tejido empresarial. Por las facilidades que ofrece, está atrayendo a un público al que la bicicleta tradicional no terminaba de convencer. "La eléctrica ha dado acceso a muchos usuarios nuevos, a gente de más edad y menor condición física que ahora vuelve a la bici con entusiasmo ", apunta Javier Sanz de Andino, director comercial de 'Unibike', feria celebrada en Madrid, a la que se han presentado más de 500 firmas y que ha crecido un 16% en número de expositores. 

La bicicleta eléctrica puede convertirse también en un vehículo empleado por los turistas, en cualquier ciudad europea, para recorrer los sitios emblemáticos y, de esta manera, contribuir a la reducción de la contaminación ambiental.