Lo que en un principio comenzó como una aventura empresarial conjunta para convertir el Edificio España (Madrid) en un hotel y continuó con la compra en solitario del 100% del inmueble por parte de RIU, ahora va a convertirse en un drama judicial.
Según informa El País, el Grupo Baraka ha denunciado a RIU por no escriturar a su nombre parte del edificio, por ello solicita que se paralicen las obras que arrancaron en octubre de 2017.
La sociedad del empresario Trinitario Casanova compró en junio el inmueble por 272 milllones de euros, que pagó al grupo chino Wanda. En ese mismo mes la cadena hotelera balear le compró el 100% del edificio que será rehabilitado y abrirá como un hotel urbano de 4 estrellas tras una inversión total de 380 millones de euros.
Mientras que desde el Grupo Baraka solicita que el área comercial (15.000 metros cuadrados) sea escriturada a su nombre tal y como se había suscrito en los acuerdos de venta, desde RIU esgrimen que “no es cierto” que Baraka tenga ningún contrato de derecho a compra o a escriturar la zona, sino que Baraka actuaba como comisionista en la venta del área comercial: "Lo que Baraka firmó con Riu en el momento de la compra fue un contrato de mandato, no representativo, de venta para la búsqueda de inversores de la zona comercial que no ha cumplido”.
