Opinión

Canarias: la relevancia agregada del turismo en el empleo

Vivir en Canarias ajenos al turismo no es posible, por muchos titulares irresponsables que lo representan como un “mal necesario”

Un 40% del empleo en Canarias depende del turismo, pues vivamos del otro 60%” ¡Va a ser que NO! Es una afirmación que suelo oír a menudo y que va vinculada a falsos mitos como “hay que reducir la dependencia del turismo” o, peor aún, "la actividad turística no es rentable para la sociedad". Pues NO vamos a poder vivir, ajenos al turismo, del otro 60%, simplemente porque la mayor parte de ese 60% también depende del turismo.

En este post argumentamos las razones y aproximamos un valor para esa dependencia real del turismo, que ya adelanto que es muy superior al 40%. Ese 40% que figura en las estadísticas oficiales aglomera los empleos directos e indirectos, pero si le añadimos los empleos derivados (los que dan servicio a la población, como p. ej. maestros, médicos, comerciantes en zonas residenciales, etc.) no vamos a más del doble de cuota, casi al 90%.

¿Y cómo podemos calcular esa repercusión total del turismo en el empleo? De forma muy simplificada podemos preguntarnos: ¿quién estaría en Canarias si no hubiera turismo? Ya esta reflexión nos indicaría que serían muy pocos habitantes. Pero veamos a continuación una manera de aproximar matemáticamente la dependencia agregada del empleo (directo + indirecto + inducido) que depende de la actividad turística:

Aproximación de la relevancia agregada del turismo en el empleo 


Dentro de las actividades económicas las hay con una función motor, es decir, que funcionan con total independencia de otras y las hay dependientes de otras. En el caso de Canarias, el turismo es la principal actividad motor y lleva asociado en la actualidad un 39,4% del empleo directo (p. ej. recepcionista de hotel) e indirecto (p. ej. proveedor del hotel) del Archipiélago (ver Impactur 2023 de Exceltur).  

No obstante, existe otro tipo de empleo asociado a una actividad: el empleo inducido (o derivado). Se refiere a los empleos creados que dan servicio a la población con empleos directos o indirectos, como pueden ser funcionarios (profesores, médicos, policías...), comerciantes en zonas residenciales, etc. Tal como hemos podido constatar en la crisis del Covid, una situación de Turismo Cero afecta también de lleno a todos los sectores de dependencia inducida. Cuando una actividad motor se apaga, se apagan las demás en cadena. Una sociedad puede subsistir muy poco tiempo con la/s actividad/es motor apagada/s, básicamente únicamente a través de subvenciones, como hemos vivido en la pandemia.

¿Qué otros motores hay en Canarias? Aparte del turismo, son pocas las actividades que en Canarias pueden ejercer también de motor económico, es decir, que no dependan de otra actividad para funcionar, como la actividad portuaria (la que no depende de la demanda interna), la industria de exportación, el comercio de exportación, la agricultura de exportación y otras actividades independientes de la ZEC, como puede ser la industria digital de videojuegos (ver "Empleo turístico: tres matizaciones").

Si atribuimos a estas actividades motor su peso aproximado en la totalidad del empleo alcanzarían un 44,44% de empleos en actividades motor, de las que casi un 40% proviene del motor "turismo".

La suma final de empleos directos, indirectos y derivados (penúltima columna) se refiere al núcleo motor de cada actividad, por lo que la producción de agricultura e industria para el turista y el residente figuran como empleos indirectos y derivados del turismo respectivamente. Es por ello que la suma en ambos sectores en la tabla no coincidirá con los datos reales aislados del empleo en ambos sectores, que es algo mayor. Otras actividades, como la construcción, son de naturaleza «indirecta» o «derivada» de los motores.

Si repartimos proporcionalmente los empleos inducidos (56% de los empleos totales) sobre las actividades motor obtenemos que el turismo aglomeraría un 89,34% de los empleos de Canarias con algún tipo de dependencia (directo, indirecto o inducido). Dicho de otra manera, casi 9 de cada 10 empleos en Canarias dependen de alguna manera de la actividad turística.

89% del empleo depende del turismo (fuente: estimación propia)

En este contexto, en 2020 Promotur, la agencia de comunicación de la Consejería de Turismo de Canarias, lanzó una campaña de concienciación turística ("Qué bien se está sin turistas") con un vídeo donde se cifró la influencia del Turismo en 8 de cada 10 puestos de trabajo en Canarias. Era la primera vez que desde las instituciones oficiales se atribuyó esta importancia al Turismo, que normalmente en los datos oficiales fue relacionado con el 40% del empleo y el 36% del PIB de Canarias. En la actualidad, la Consejería de Turismo mantiene la atribución al turismo de más del 80% del empleo en Canarias.

Campaña de Promotur del 2020

Efecto multiplicador


Por tanto, según esta aproximación, pasamos de una relevancia del 39,40% (directo + indirecto) a una del 89,34% (total), lo que supone un efecto multiplicador del 2,3. La diferencia es justamente la población que da servicios a la población con dependencia directa & indirecta (y a sí misma) y que, por tanto, también vive del turismo, aunque muchas veces no tengan conciencia de ello.  

En las estadísticas turísticas globales, a menudo se habla precisamente de este «2,3» como multiplicador desde los empleos directos del turismo hacia la suma de indirectos & derivados. En el cálculo de este post hemos obtenido el 2,3 partiendo ya de la suma de directos&indirectos. Si lo hiciésemos para Canarias desde los empleos directos del turismo (29% de los empleos) obtendríamos un multiplicador de 3. Es decir, por cada empleo turístico directo se generarían otros dos de forma indirecta & derivada.   

¿Y esto qué repercusión tiene?


Esta aplastante relevancia del turismo puede parecer no tener repercusión práctica, pero sí la tiene. Conlleva considerar el turismo como un “Bien de Interés Económico” y defender a toda costa a sus bienes más tangibles, al turista y al residente, lo que justificaría medidas como, por ejemplo, las siguientes:

Incluir las estimaciones de los empleos inducidos de la actividad turística en los estudios Impactur de Exceltur (antes de 2010 estuvieron incluidos). Ello, al menos, daría una aproximación científica de la relevancia real del turismo y crea concienciación en el ciudadano.

  1. Rebajar el discurso de la necesidad de diversificación económica, pues dicha diversificación no es viable (de forma significativa) y, además, el discurso permanente crea un impacto negativo en la población, por un lado, por su desprecio al turismo y, por otro lado, porque crea falsas expectativas de supuestas actividades económicas alternativas que serían más rentables, lo cual se ha evidenciado como falso (las condiciones laborales en el sector turístico en Canarias son superiores a cualquier otro sector).
  2. Medidas de protección de los turistas, como, por ejemplo, una aprobación de servicios mínimos de más del 25% en caso de huelgas en el sector turístico o, incluso, considerar la prohibición de manifestaciones anti-turistas en los mismos núcleos turísticos.  
  3. Narrativa real sobre profesiones turísticas: Crear desde el sector empresarial hotelero y desde el sector público campañas de imagen que expresen la realidad y las bondades de las profesiones turísticas con el fin de contrarrestar la narrativa negativa que se impone perjudicialmente y que no se corresponde con la realidad o está basada en situaciones excepcionales (ver aquí cómo TUI comunica las bondades de sus profesiones).
  4. ¡Ni una cama menos! Canarias está perdiendo una parte importante de su capacidad alojativa tradicional, que es la que aporta empleo, ingresos fiscales y gasto turístico (ver datos en la segunda parte de este post). De ahí se hace necesario conservar a toda costa la capacidad alojativa tradicional (como eje del motor turístico) e impedir las conversiones de camas hacia explotaciones anárquicas no reguladas, que pretenden extinguir el principio de «unidad de explotación», y/o procesos de residencialización con objetivos de revalorización y venta a extranjeros con fines residenciales.
  5. Educación: revisión de los libros de educación en la educación primaria y secundaria para asegurar que, en el primer acercamiento intelectual del niño al turismo, la narrativa turística es la adecuada y no represente al turismo como un "mal necesario".

En definitiva, se trata de posicionar el turismo en el lugar de importancia que realmente tiene para nosotros en nuestra economía.

Conclusión


Vivir en Canarias ajenos al turismo no es posible, por muchos titulares irresponsables que lo representan como un “mal necesario”.

 

*Artículo publicado originalmente en el blog de Antonio Garzón, fundador y gerente de Nutrihotel (nutrihotel.com).

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