Canarias tiene un objetivo inmediato: demostrar a los países europeos que son un destino seguro y convencer a sus propios ciudadanos de que el turismo no es una amenaza. Para ello, diferentes instituciones insulares están aportando sus ideas y una de las más peculiares es la propuesta por el Cabildo de Fuerteventura.

Desde su Patronato de Turismo han recomendado  la creación de la figura de  ‘rastreador turístico’. La idea es habilitar a guías turísticos oficiales nativos que colaboren con el Servicio Canario de Salud en localización de posibles positivos de Covid-19 entre los turistas internacionales y su atención en su propio idioma.

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“Este servicio podría dar seguridad a visitantes internacionales que serán atendidos en idiomas como el alemán, polaco, francés, inglés o italiano, ofreciendo asistencia y rastreo a turistas que pudieran dar positivo en Covid-19”, ha explicado Moisés Jorge, gerente del Patronato de Turismo durante una reunión con los guías oficiales.