Ha fallecido José Bouzón, fundador del restaurante Rías Bajas, un local que se convirtió el "hub de relaciones" empresariales, comerciales y sociales de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria.

El pontevedrés, más conocido como Pepe, llegó a Gran Canaria en 1991, inaugurando el citado restaurante que, rápidamente se convirtió en el punto de encuentro para el sector económico de la isla. Empresarios turísticos destacan que todo el que quería “entrar” —comercialmente hablando— en Gran Canaria, tenía que hacer parada obligatoria en este local ubicado en la zona de Santa Catalina, cerca del Muelle de Cruceros.

Bouzón fue el chef y propietario de la marisquería hasta 2017, cuando decidió retirarse y dedicarse a viajar. Los que le recuerdan, destacan su carácter amistoso, alegre y dicharachero.

Su legado queda en manos de sus hijos, algunos de los que han seguido sus pasos en el sector de la restauración, como David Bouzón, propietario de Saliviento, en San Bartolomé de Tirajana. El propio David ha dedicado un emocionado mensaje de despedida en el que ha subrayado que su padre era “un tipo con una energía imparable”. “Fue un emprendedor de alma que dejó marca allá por donde pasó y supo asentar un modelo de hostelería sin precedentes en la isla de Gran Canaria”, ha subrayado.